SOLEMNE TRIDUO EUCARÍSTICO
Del 12 al 14 de mayo, a las 20 horas esta Hermandad Sacramental celebrará
Solemne Triduo Eucarístico en su sede canónica, la Parroquia de San Bartolomé. Será predicado por el párroco y director espiritual de la Hermandad, el M.I.Sr. D. Carmelo Zamora Expósito.
Con motivo del Año de la Misericordia, el altar estará presidido por el Santísimo Cristo de la Expiración, evocando la simbología eucarística del Cordero que derrama su sangre, por todos, como bebida de salvación.
"El Cenáculo es el lugar de la institución de este Santísimo Sacramento. Allí Cristo tomó en sus manos el pan, lo partió y lo dio a los discípulos diciendo: « Tomad y comed todos de él, porque esto es mi Cuerpo, que será entregado por vosotros » (cf. Mt 26, 26; Lc22, 19; 1 Co 11, 24). Después tomó en sus manos el cáliz del vino y les dijo: « Tomad y bebed todos de él, porque éste es el cáliz de mi sangre, sangre de la alianza nueva y eterna, que será derramada por vosotros y por todos los hombres para el perdón de los pecados » (cf. Mc 14, 24; Lc 22, 20; 1 Co 11, 25)… en la celebración eucarística, los ojos del alma se dirigen al Triduo pascual: a lo que ocurrió la tarde del Jueves Santo, durante la Última Cena y después de ella. La institución de la Eucaristía, en efecto, anticipaba sacramentalmente los acontecimientos que tendrían lugar poco más tarde… Los Apóstoles que participaron en la Última Cena, ¿comprendieron el sentido de las palabras que salieron de los labios de Cristo? Quizás no. Aquellas palabras se habrían aclarado plenamente sólo al final del Triduum sacrum, es decir, el lapso que va de la tarde del jueves hasta la mañana del domingo… La sangre, que poco antes había entregado a la Iglesia como bebida de salvación en el Sacramento eucarístico, comenzó a ser derramada ; su efusión se completaría después en el Gólgota, convirtiéndose en instrumento de nuestra redención"
(JUAN PABLO II, Carta Encíclica ECCLESIA DE EUCHARISTIA, 17 de abril 2003, nn. 2-3)